Se trata de un estado disociado de conciencia, el cual forma parte de la fisiología habitual del sistema nervioso central. En otras palabras, es una condición propia de la naturaleza humana; un concepto ajeno de aquellas posturas que la definen como una situación extraordinaria o de alteración de consciencia.
Todas las personas experimentan con regularidad estados de trance, los que, a su vez, se definen como el conjunto de manifestaciones psico-fisiológicas que ocurren en alguien cuando su mente se encuentra focalizada o absorta en alguna experiencia. Es cosa de pensar, por ejemplo, en alguna lectura interesante, de esas que atrapan.

USOS DE LA HIPNOSIS

Desde los inicios de la historia del hombre, la hipnosis ha sido la herramienta más eficiente para alcanzar un nivel idóneo de sanación, tanto desde el punto de vista espiritual como desde lo psicosomático.
La hipnosis nos ha aportado un pasaje para viajar a través del cuerpo humano, a través de la mente y de todas sus complejidades. Así, los hombres hemos usado la hipnosis tanto en medicina alternativa como en medicina tradicional. Cuando nada parece tener una explicación lógica, el hipnoterapeuta se conecta con lo más profundo del ser para efectuar esta sanación. Por ende, la hipnosis ha sido, es y será utilizada para todo tipo de enfermedades, trastornos, patologías, siempre y cuando tengan su origen en la mente inconsciente.